CANO a priori presentaba un equipo con buenos nombres, no habituales titulares pero aún así, una nómina prometedora. Ale al arco, Agus, Mateo y Chiche abajo, y repartiéndose el medio y la delantera los Mola Boys, Nico, Santi y Sebi.
El rojo, por su parte, trajo gente nueva que sabía mover la bocha y que además corría y no se cansaba. Esto provocó un total desorden en el equipo azabache, que parecía un panal de abejas en donde todas las obreras seguían a las otras abejas sin un rumbo asegurado. Marca personalizada, que cuando alguno de los de arriba no bajaba a colaborar, quedaba sin efecto y producía un hueco que los rojos supieron aprovechar.
El encuentro se puso rápidamente 2 a 0 a favor de los de CUDY. De nuestro lado, mucha tibieza. Apenas si nos arrimábamos al arco, y sin peligro, mientras que el rojito controlaba la pelota. Por fin llegó el ansiado descuento, después de algunas chances desperdiciadas, y cuando la cosa estaba 2 a 1, tuvimos MUCHAS situaciones de gol que por mala suerte no terminaron adentro. A destacar, una chance doble que tuvo Santi ABAJO del arco después de presionar, en la que primero tapó el arquero y en el rebote dio en el palo. Increíble, pero la bocha de nuestro lado no quería entrar.
En una ráfaga los rojos clavaron 3 goles más, para ponerse 5 a 1. Hubo descuento, pero aumentaron otra vez, y ya hacia el final Mateo reemplazó a Ale, Sebi se clavó abajo y todo se desarmó, aunque sin cambiar demasiado la cosa. Seguimos errando goles y ellos siguieron metiéndolos (algunos con bailongo incluido), con lo que el marcador final fue un adverso 9 a 3.
Triste partido, en donde se extrañó mucho al mediocampo de Gato y Simon. Habrá que cambiar el chip para el martes que viene si queremos ilusionarnos con salvar las papas este verano.
Puntaje del equipo: 4.
Vamos, negro, que se puede!!
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